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28 nov 2010

Ahora que llegan las fiestas navideñas podemos darnos cuenta de la importancia que damos a las cosas, seguramente no somos conscientes de que la sociedad actual nos empuja, en esta época quizá más que en otras, al consumismo desmesurado. Este anuncio me ha lamado la atención por la forma tan curiosa y a la vez graciosa en la que un padre engaña,en cierta manera, a su hijo para ahorrarse algún dinero. Este año quizá muchas familias tengan que sopesar antes de gastar.

3 comentarios:

  1. Me encanta la manera humorística que tiene el anuncio de mostrar la realidad de nuestra sociedad, tan consumista y a la vez tan inconsciente de todo lo que derrochamos sin necesidad ninguna. En verdad, deberíamos ser más conscientes de las personas que de verdad tienen serias necesidades y ser un poquito más solidarios.

    Eva gracias por compartir este anuncio, tan sencillo pero a la vez tan lleno de sentido y de realidad.
    Un saludo.

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  3. Sin duda es un buen anuncio. El padre es muy hábil a la hora de contestar al niño cómo se escribe la bici que se quiere pedir... Y es que en estos tiempos de crisis, deberían muchos padres a agudizar así el ingenio...

    El mensaje es bastante claro: no es necesario derrochar en regalos para que los niños sean felices. Ya está bien de tanto regalo desorbitado y de tanta cantidad de ellos, como los niños reciben en estas fechas.

    Los niños son felices con cualquier cosa que se le entregue siempre que haya cariño. Por ejemplo, se conforman con un palo que haga de escoba, con un bolígrafo que haga de micrófono, con un trapo que haga de vestido para su muñeca, con un trozo de papel y pinturas para expresar su vena artística, etc.

    Parece que todo esto se nos olvida, porque cada año veo cómo los niños siguen recibiendo muchos regalos y no baratos. Y además, para que luego pierdan pronto el interés por ellos (al tener tantos...).

    ¿Pero no estábamos en crisis? ¿Por qué siguen estando los centros comerciales hasta arriba de gente cargada de bolsas? No entiendo nada...

    (Parece que me he desahogado un poco, pero es lo que pienso en realidad...)
    Un saludo.

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